Un millonario instala una cámara oculta y capta a su criada en una acción que cambiará toda su vida.
Conformado.
La mansión Kler estaba tranquila casi todos los días, limpia, fría y cara.

Jonathan Kler, un millonario con traje elegante y una mandíbula tan estricta como su horario, dirigía su imperio como una máquina.
Advertisement
Cada segundo contaba.
Cada dólar tenía un propósito.
Las emociones lo distraían incluso en casa.
Desde la muerte de su esposa dos años antes, Jonathan se había sumergido en el trabajo.