Este cereal, aunque subestimado por muchos, contiene gran cantidad de proteínas vegetales de un tipo especial, que se convierten en fuente de purinas. Y las purinas, como sabemos, son un camino directo al exceso de ácido úrico.
La cebada es saludable con moderación, pero si la consumes constantemente, puede empeorar la inflamación de las articulaciones. Especialmente en personas mayores de 50 años.
2. Trigo sarraceno: un favorito, pero con una trampa.
Al parecer, ¿cómo puede nuestro trigo sarraceno autóctono causar daño? Sin embargo, también se encuentra entre los alimentos con mayor contenido en purinas. Para aquellos que tienen un metabolismo lento, esto puede ser un verdadero problema.
Mi consejo es seguir la regla de las tres “P”: remojar durante al menos 4 horas, cocinar sin pasarse y no comer más de 150 gramos por porción.
3. La avena instantánea es un engaño peligroso
Cómodo, ahorra tiempo… pero en esencia es un producto procesado hasta el límite. Aumenta rápidamente los niveles de azúcar en la sangre y provoca inflamación. Mi amiga Svetlana, ex deportista, empezó a tener dolores en las articulaciones precisamente después de cambiar a un desayuno tan “saludable”. Reemplazamos su dieta con trigo sarraceno germinado verde: el efecto fue asombroso.
¿Qué podemos comer en lugar de los cereales “dañinos”?
1. Quinoa: aporte proteico sin sobrecarga