Ingredientes:
2 tazas de hojas de romero fresco (o ½ taza si está seco)
1 litro de agua hirviendo
1 taza de sales de Epsom (opcional, para mayor relajación muscular)
5 gotas de aceite esencial de romero (opcional, para intensificar el efecto)
Preparación:
Infusión de romero: Hierve el agua y agrega las hojas de romero. Déjelo reposar durante 15-20 minutos para que libere sus propiedades.
Cuela la mezcla y viértela en la bañera con agua tibia (no demasiado caliente para evitar irritaciones).
Agregue las ventas de Epsom y el aceite esencial si desea potenciar el efecto relajante.
Sumérgete durante 20-30 minutos, masajeando suavemente las zonas doloridas.
Recomendaciones para su Uso Adecuado