Cerca de un 10 por ciento de la población sufre las llamadas “talalgias” a lo largo de su vida, siendo uno de los dolores más incapacitantes al caminar, según el Ilustre Colegio Oficial de Podólogos (Icopcv). La fascitis plantar es una de las patologías que se relaciona con más frecuencia a dolor de talón. Pero no es, ni mucho menos, la única. Para empezar, ¿cuándo hay que consultar a un especialista? Si el dolor no remite tras siete días, la toma de antiinflamatorios y/o el reposo.
“Por lo que se refiere a las causas extrínsecas, generalmente, el dolor de talón aparece en personas que pasan tiempos prolongados de pie trabajando, bien por una falta de la almohadilla de la grasa de la planta del pie, en caso de sobrepeso o en el deporte por una sobrecarga de entrenamiento, sobre todo en el running”, enumera Maite García Martínez, presidenta del Icopcv. También destaca el calzado laboral, como las botas de seguridad que tienen materiales rígidos y pesados que no permiten la movilidad natural del pie.
Correr y abusar de zapatos de tacón alto
Otra de las causas de dolor de talón citadas por esta podóloga es tener el músculo tríceps sural retraído. “El tríceps sural está compuesto por los dos gemelos y el músculo sóleo; de ahí su nombre ‘tres músculos, tríceps’. Está más retraído en corredores y corredoras porque en la técnica de carrera se exige a la musculatura trabajar tres veces más que andando y su pequeño tamaño hace que cuando gane volumen pierda longitud con más rapidez que otros músculos”, señala García Martínez.
Sin embargo, sucede de forma distinta cuando se abusa del tacón: al cambiar la posición del pie y dejar el talón más alto que el antepié, el tríceps sural se acostumbra a esa posición y, sumado a la inestabilidad de andar con el tacón, será más complicado luego volver a su forma original.