Es blanco, rico en almidón, fácil de cultivar… y, sin embargo, puede ser peligroso. En algunas partes del mundo, este producto es más que un alimento: es una necesidad. Pero tras su aparente simplicidad se esconde un secreto inquietante. Cada año, es responsable de la muerte de más de 200 personas. ¿Cómo puede una verdura tan común ser tan peligrosa? Y, lo que es más importante, ¿por qué seguimos comiéndola? Adelanto: la respuesta no es tan sencilla como parece…
Un campeón de supervivencia… con un gran defecto
Originaria de Sudamérica, la yuca, también conocida como mandioca, se cultiva actualmente en toda la zona tropical. Es resistente a la sequía, prospera en suelos pobres y aporta calorías rápidamente. No es de extrañar que se haya convertido en un alimento básico en muchos países de África, Asia y Latinoamérica.
Pero cuidado: la yuca, especialmente en su variedad llamada “amarga”, contiene naturalmente sustancias llamadas glucósidos cianogénicos . Si no se eliminan adecuadamente, estos compuestos liberan cianuro . Sí, cianuro , una toxina muy dañina para el sistema nervioso.
Envenenamiento y enfermedades: cuando la yuca se vuelve peligrosa
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la yuca mal preparada puede causar intoxicación aguda, a veces mortal. Cada año, se registran aproximadamente 200 muertes en todo el mundo debido a una preparación inadecuada . Y eso no es todo: el consumo prolongado de yuca mal procesada, especialmente en épocas de crisis alimentaria, puede causar konzo , una enfermedad neurológica que causa parálisis irreversible de las piernas . Preocupante, ¿verdad?
Este tipo de tragedia suele ocurrir en contextos extremos, donde evitar el hambre se convierte en la máxima prioridad . La yuca se convierte entonces en una solución de supervivencia… que puede convertirse en una trampa si no se prepara adecuadamente.