resguardada quería abrazarla darle las gracias en persona sin esa niña nada de esto hubiera sido posible entró al pequeño departamento sin hacer ruido ella estaba en el sillón viendo caricaturas envuelta en una cobija con un plato de cereal a medio terminar ¿todo bien preguntó él al entrar valeria lo miró y asintió tenía la cara tranquila ya se veía más sana el medicamento había hecho efecto pero algo en su mirada estaba distinto como si supiera que algo venía ya los arrestaron ¿verdad sí respondió Ramiro sentándose junto a ella están bajo custodia van a
pagar por lo que hicieron valeria se quedó callada unos segundos miraba la pantalla pero ya no ponía atención luego giró la cabeza y lo miró a los ojos tengo que decirte algo más ramiro frunció el ceño ¿qué pasó valeria se acomodó la cobija bajó el volumen de la televisión y se sentó más recta parecía nerviosa no te lo dije antes porque no estaba segura y porque no sabía si me ibas a creer ramiro la miraba sin parpadear ¿qué cosa ella bajó la mirada mi mamá antes de morir me dijo que tenía que encontrarte ¿qué me dijo que si algún día algo malo pasaba fuera
contigo que tú eras mi papá el mundo se detuvo ramiro no entendió lo que acababa de oír no supo si había escuchado bien se quedó mudo la miró sin decir nada ella lo veía con los ojos brillosos como si al fin se quitara un peso del alma ¿cómo dices mi mamá se llamaba Clara tú la conociste hace años dijiste que era algo de una noche pero para ella no fue cualquier cosa se embarazó y nunca te encontró después me lo dijo cuando ya estaba muy enferma me pidió que no te odiara me dijo que eras buena persona
que tal vez ni sabías que existía ramiro se recargó en el respaldo del sillón con la cabeza llena de imágenes clara claro que la recordaba había sido hace mucho cuando él todavía no era el Ramiro de ahora cuando vivía al día salía con muchas mujeres tomaba malas decisiones y no pensaba en el futuro clara era una de esas historias que se quedan en una esquina del recuerdo jamás pensó que ella que eso “¿Estás segura?” logró preguntar valeria asintió “sí ella me lo dijo varias veces me dio una foto la tengo en la mochila se levantó fue por su mochila y sacó una
foto vieja ramiro la tomó con manos temblorosas era él más joven con Clara a su lado los dos en una fiesta abrazados no recordaba que alguien hubiera tomado esa foto pero ahí estaba yo no sabía dijo él con la voz quebrada valeria lo miró lo sé por eso no dije nada antes ramiro no supo si llorar o reír tenía una hija siempre la tuvo y nunca lo supo la niña que lo había salvado de la muerte no era una extraña era su hija ramiro se quedó viendo la foto por un buen rato no la soltaba era como si al fin algo hiciera click en su cabeza esa imagen lo había sacado de todas las
dudas ahí estaba él más joven más tonto más despreocupado y Clara abrazándolo como si todo el mundo se le acomodara solo con tenerlo al lado era la única prueba que necesitaba no había forma de negar lo que Valeria le acababa de decir esa niña no era cualquier niña era su hija su sangre su historia que él mismo había ignorado por años sin saberlo no sabía qué decir ni siquiera sabía qué sentir tenía el pecho apretado la cara caliente las manos temblorosas valeria lo miraba en silencio sin presionarlo le había soltado la bomba
más grande de su vida con una tranquilidad que solo alguien como ella podía tener después de todo lo que había vivido de todo lo que había visto parecía entender que no hacía falta hacer drama lo importante ya estaba dicho yo no sabía repitió Ramiro con la voz apagada lo sé respondió ella suave pero ahora lo sabes se quedaron callados un buen rato ramiro pensaba en todo lo que había pasado el restaurante el pastel Jimena Ricardo la policía las mentiras el veneno todo cada cosa lo había ido empujando a este momento sin que él lo
supiera como si alguien allá arriba hubiera armado una cadena de locuras solo para que se encontraran para que supiera que tenía una hija para que ella no se quedara sola era demasiado para procesar valeria se volvió a sentar en el sillón abrazando la cobija miraba el suelo “mi mamá murió hace 4 meses” dijo sin mirarlo ya no comía bien se enfermó no tenía con qué pagar medicina cuando ya estaba muy mal me contó todo me dijo que tú eras un buen hombre pero que no te había dicho nada en su momento porque tenía
miedo que tú no querías una familia que te ibas a asustar después cuando nací te buscó pero ya no estabas te habías mudado cambiaste de número cambiaste todo ramiro apretó los dientes se sentía un imbécil no por haber estado con Clara sin compromiso sino por haberse borrado tan fácil por haber vivido como si no le debiera nada a nadie por no haber mirado atrás por no haber pensado que tal vez sí había dejado algo más allá de una noche ¿y por qué me buscaste ahora porque ella me lo pidió me dijo que si algo le pasaba tenía que encontrarte que
tú ibas a cuidarme y aunque no te conocía lo hice me vine sola estuve días en la calle buscando hasta que te vi en ese restaurante y después pasó todo lo demás ramiro se frotó la cara el estómago le dolía no era hambre era culpa era sorpresa era miedo nunca en su vida se había sentido tan perdido tan vacío pero al mismo tiempo tan claro había cosas que no podía cambiar pero sí podía decidir qué hacer con lo que le quedaba se acercó a Valeria se arrodilló frente a ella y la tomó de las manos le temblaban no sé cómo voy a hacer esto pero si me
dejas quiero intentarlo quiero estar aquí no como obligación no porque tu mamá me lo pidió quiero hacerlo porque tú me salvaste y porque eres mi hija y eso eso lo cambia todo valeria lo miró con los ojos llenos de agua pero no lloró solo asintió yo no necesito que me compres nada solo que no me dejes ramiro la abrazó fuerte como si el mundo se estuviera cayendo y solo ellos quedaran en pie no dijo nada más no hacía falta esa noche Ramiro no durmió se quedó despierto viendo como Valeria dormía en el sofá respiraba tranquila como si por fin
hubiera encontrado un lugar donde descansar sin miedo él se sentó en una silla la observó en silencio pensó en clara en lo mucho que debió haber sufrido sola en lo fuerte que había sido para criar a Valeria sin ayuda pensó en todo lo que se perdió sus primeros pasos sus cumpleaños sus días de escuela sus enfermedades sus preguntas todo y entendió que tal vez por eso tenía que pasar todo esto tal vez por eso Jimena apareció por eso Ricardo volvió por eso casi muere porque la vida aunque a veces da vueltas retorcidas también acomoda las cosas cuando menos lo esperas no siempre con
flores a veces con fuego con lágrimas con rabia pero al final todo llega al lugar donde debe estar valeria ya no era una niña de la calle era su hija y ahora lo único que le quedaba a Ramiro era no volver a fallarle
