Desde la antigüedad, los anillos han tenido profundos símbolos y significados. Si el anillo de bodas que se lleva en el dedo anular es un signo universal de compromiso, ¿qué pasa con los otros dedos? ¿Por qué algunas personas eligen llevar un anillo en el pulgar o en el meñique? Detrás de estas elecciones, a menudo triviales, se esconden mensajes reveladores sobre la personalidad y las aspiraciones de cada persona. Descubramos qué revelan estas joyas cotidianas.
Pulgar: autoafirmación y energía bruta.
El pulgar está asociado con Marte, el dios de la guerra. Llevar un anillo en este dedo suele ser signo de una personalidad fuerte, decidida y enérgica. Esto refleja una gran confianza en uno mismo, a veces acompañada de un carácter asertivo y dominante.
Nota: En la antigüedad, los hombres usaban anillos de hierro en los pulgares para simbolizar su poder y virilidad. Hoy en día, esta elección también puede estar vinculada a una afirmación personal o a la pertenencia a la comunidad LGBTQ+.
Índice: Liderazgo y ambición