Simplemente quema unas cuantas hojas de laurel en un recipiente y deja que el olor impregne tu interior. Económica y natural, esta planta ayuda a purificar el aire ambiente sin presentar ningún peligro para la salud.
La próxima vez que te sientas estresado, con insomnio, ansioso, de mal humor o simplemente necesites perfumar tu hogar, enciende el radiador, saca dos o tres hojas de laurel y disfruta de sus beneficios.