¿Qué estás haciendo? —balbuceó él, como si no supiera realmente qué decir.
Yo no respondí de inmediato. Solo terminé de ajustar las ruedas de la silla, acaricié suavemente el cabello de su madre y le dije: —Mamá, aquí estarás bien. Tu hijo por fin tendrá tiempo para cuidarte. Ella sonrió, con esa dulzura ingenua de quien no comprende toda la magnitud de lo que está pasando. Años … Read more