Pelar y cortar la cebolla en trozos pequeños. Triturar los trozos en una licuadora o procesador de alimentos hasta que quede una mezcla homogénea. Colar la mezcla con una estopilla o un colador de malla fina para extraer el jugo.
Mezclar con aceite de coco:
Calienta 2 cucharadas de aceite de coco hasta que se vuelva líquido. Mezcla el aceite de coco con el jugo de cebolla. Si lo deseas, agrega unas gotas de tu aceite esencial favorito para disimular el olor a cebolla.
Solicitud:
Divide tu cabello para exponer las zonas calvas. Con una bolita de algodón o un cepillo aplicador, aplica la mezcla directamente en el cuero cabelludo, concentrándote en las zonas calvas. Masajea suavemente la mezcla en el cuero cabelludo durante unos 5 minutos.
Déjalo reposar:
Deja la mezcla en el cuero cabelludo durante al menos 30 minutos. Para obtener mejores resultados, puedes dejarla actuar durante la noche y enjuagarla por la mañana.
Enjuagar:
Lávate el cabello con un champú suave para eliminar la mezcla. Repite este proceso 2 o 3 veces por semana para obtener resultados óptimos.