- Identifica y evita posibles desencadenantes como alimentos, productos químicos o situaciones de estrés.
 - Usa ropa holgada de algodón para evitar irritaciones.
 - Mantén la piel hidratada con cremas sin fragancias.
 - Evita duchas muy calientes y opta por agua tibia.
 
La urticaria, aunque incómoda, no tiene por qué afectar tu calidad de vida si se maneja de manera adecuada. Escucha a tu cuerpo, busca ayuda profesional y prueba soluciones naturales para aliviar los síntomas. ¡Tu piel te lo agradecerá!