Si alguien en un grupo admite que orina en la ducha; la expresión mas común es una cara de asco. Además; le lanzan miradas extrañas. Esto se debe a que esta es una costumbre inaceptable en nuestra sociedad; principalmente por la higiene. Pero; realmente orinar en la ducha es muy inofensivo; e incluso con este método puedes ahorrar mucha agua.
Los defensores de esta práctica aseguran que una persona puede utilizar hasta 15 litros de agua al día para bajar la cadena. Si multiplicamos esta cantidad por nuestra población y los días del año; nos daremos cuenta que desperdiciamos muchas toneladas de agua al año.
Claro esta; existen inodoros ecológicos que tienen un sistema de bajo flujo; pero estos no son suficientes para bajar de manera eficiente el consumo del agua. Por esto; como todos los días las personas se bañan; tiene sentido aprovechar ese momento para orinar y en ese momento aprovechamos y nos lavamos. De este modo; no solo nos encontramos ahorrando agua sino que también estaremos ahorrando papel higiénico.
