uno isunato ravas grandis rilo metroidunanti lerog simpl contrato destino dermino antisoant Jamal numero del colaborador posta toxi coriano mendosa m partnos el coro a travola reception ignorand protestas de la receptionista inutina caviola the tubo elbro diego elo tris theor inina yastatia legosina putus greimaanti ponado the harlo solo clara gritara tamora mateo Felice emosinano parascoos legos nounra Diego free mentiomateo del mano perantos por mosakosina dento elor theo last man of stem bland the o and promenteolo nino the diego kin jot and miranda mateo alos dek bases las personas separation simple manto car mous personas and elmando
mismosobos perobas drastri muscle mateo labrado sano en pino the Claro ela sumadre sul apoyo intento explicabras nendo intendo kale senor mendavia con era supadre peroa susbitas porcelos abasus sun complicatus mateo iso mil prontis porabito antisip noibia conejos luaba clara respondiokua con resilience no simplement pronto mendosa no por ilusampo compendio Genos lensusas lantos ganados garden subida Barcelona no contentar referendo la persona más importante de y lentement imperceptiblemente algo cambió también entre ellos no amor eso había muerto 6 años antes, pero respeto, comprensión.
Diego había terminado con Lucía años antes. Había hecho terapia. había trabajado en sí mismo. Clara veía a un hombre diferente del que se había casado, más humilde, más presente, más consciente. Un año después de ese fatídico encuentro en la sala de juntas, Clara, Diego y Mateo estaban sentados juntos en el parque. Mateo jugaba con otros niños mientras ellos dos miraban en silencio. Diego rompió el silencio agradeciendo a Clara por darle esta segunda oportunidad, por compartir a Mateo con él.
A pesar de todo, Clara asintió. Luego dijo algo que sorprendió a ambos. Dijo que quizás ella también debía agradecerle, porque si 6 años antes no la hubiera dejado ir, nunca habría descubierto lo fuerte que era. No habría construido su carrera, no habría aprendido que podía lograrlo sola. Diego sonrió tristemente diciendo que ella siempre había sido fuerte. Él simplemente había sido demasiado ciego para verlo. Miraron a Mateo correr feliz, su cabello negro blillando al sol. Ya no eran una familia en el sentido tradicional, pero eran algo nuevo, algo construido sobre las ruinas de lo que había sido destruido.
Y mientras Mateo los llamaba para mostrarles una flor que había encontrado, Plana se dio cuenta de que a veces las mejores familias no son las que nacen del amor romántico, sino las que se construyen pieza por pieza con paciencia, perdón y la determinación de hacer lo mejor por quienes amas. La prueba de embarazo rota 6 años antes no había llevado a la familia que había imaginado, pero algo más precioso había traído a Mateo, había traído fuerza, había traído crecimiento, que al final era más que suficiente.