El hígado graso no me dio paz hasta que corregí los errores. Un experto nombra 7 alimentos que le encantan al hígado

Dieta para la enfermedad del hígado graso: qué puedes y qué no puedes comer
Una de las dificultades del tratamiento es abandonar alimentos familiares pero nocivos. Si una persona está acostumbrada a alimentos grasos, salados y picantes, estos productos no pueden excluirse abruptamente. Esto puede suponer un estrés adicional para el hígado y empeorar la situación. Por lo tanto, es necesario abandonar los productos nocivos gradualmente, en el transcurso de 2 a 3 semanas.

Lo que debes dejar:

cualquier producto con un alto contenido de grasa (más del 5% ya no es deseable)
alimentos con alto contenido de sal o azúcar
caldos fuertes (incluidos los de verduras)
alimentos ahumados y enlatados
legumbres
quesos grasos y picantes
Especias con un distintivo sabor picante
carne grasa
cebollas frescas
Cómo sustituir productos nocivos:

alimentos bajos en calorías (vigile el contenido calórico incluso de los alimentos comprados en la tienda)
alimentos con bajo índice glucémico (ayudan a reducir los niveles de azúcar en sangre)
más verduras frescas
pescado magro (hervido, horneado, pero no frito)
Esta dieta es el paso principal hacia la restauración del hígado. Pero la actividad física moderada no es menos importante: caminar, nadar, yoga. Esto ayuda a mejorar el metabolismo y acelera la limpieza del hígado.

7 alimentos que mejoran la función hepática
En una entrevista con el Dr. Bokeria, aprendí sobre 7 productos que son especialmente beneficiosos para el hígado. Si los combinas con una nutrición adecuada (mínimo de grasas, sal y azúcar), ¡puedes incluso vencer la enfermedad del hígado graso! Aquí están:

Verduras crucíferas
Repollo (de cualquier tipo), espinacas, lechuga, rúcula, rábano, rábano picante: todo esto limpia el hígado y lo ayuda a funcionar mejor.

Brotes y verduras tiernas
No importa qué tipo de cultivos sean: contienen una gran cantidad de enzimas y vitaminas útiles.

Huevos
Puedes comerlo de cualquier forma, pero no más de 2 piezas al día. Contienen colina, que combate el exceso de grasa en el hígado.

Ajo
No solo es un antibiótico natural, sino también un potente asistente para el hígado: ayuda al órgano a recuperarse más rápido de los daños.

Limón
Alivia la inflamación en el hígado y acelera el proceso de regeneración celular.

Remolacha
Funciona como el limón: limpia el hígado y lo ayuda a lidiar con el estrés.

pescado graso
¡Sí, exactamente las variedades grasas! Contienen ácidos Omega-3 beneficiosos que protegen al hígado de su destrucción.

 

En resumen: Cómo superé mi hígado graso
Descubrí el problema a tiempo y gracias a ello pude solucionarlo sin un tratamiento complejo. Todo lo que tuve que hacer fue cambiar mi dieta, agregar alimentos saludables y eliminar los no saludables. Después de varios meses de una nutrición adecuada, todos los síntomas desagradables desaparecieron.

¡IMPORTANTE!
Este texto es sólo de carácter informativo y no sustituye la consulta médica. Si tiene una enfermedad del hígado graso avanzada, asegúrese de consultar a un especialista. Sólo un médico puede prescribir los medicamentos necesarios y una dieta individualizada.

¡Cuida tu hígado y te servirá por muchos años! ¿Te gusto el artículo? ¡Compártelo en los comentarios!

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