- Prueba de sensibilidad: El ajo puede causar irritación. Aplica primero en una pequeña zona.
- Higiene: Lávate y sécate bien antes y después de aplicar los tratamientos.
- Consulta médica: Si los síntomas no mejoran en dos semanas, acude a un dermatólogo.
- Ajo fresco: Utiliza siempre ajo fresco para garantizar la presencia de alicina activa.
Evidencia Científica
Estudios en publicaciones como Journal of Antimicrobial Chemotherapy y Mycoses Journal han demostrado la eficacia del ajo contra hongos patógenos, especialmente Candida albicans y Trichophyton spp., responsables de infecciones comunes en la piel, uñas y cuero cabelludo.
Conclusión
El ajo es una alternativa natural poderosa contra los hongos, gracias a su acción antifúngica, antibacteriana y regeneradora. Su uso constante y complementado con buenas prácticas de higiene puede ayudarte a eliminar estas infecciones de manera efectiva y sin químicos agresivos. Como siempre, ante cualquier duda o si el problema persiste, consulta a un profesional de la salud.